Letelier, pretotalitario - Columna pretotalitaria

        Se corren las fronteras. Pocos días antes de que el mundo cristiano inicie en Chile su más santa celebración, un senador socialista, Juan Pablo Letelier, corre las estacas otros pocos metros.         Apoyado en los ocho años que tiene por delante -ciertamente es la suya una posición dominante, legalmente obtenida-  declara que "hay un abuso de una posición dominante de la Iglesia en el debate educacional."
        ¿Abuso? Para la mentalidad pretotalitaria de todos los allendistas, el mantener posiciones claras y firmes contrarias a las convicciones socialistas es siempre un abuso.
        Es difícil que el senador Letelier entienda qué es la Iglesia Católica, pero no es complicado para los católicos entender los que el parlamentario socialista quiso sugerir.
        Sabe que "es muy impopular lo que voy  a decir" y afirma que la católica "es la religión más masiva que hay en nuestro país, pero no es la única." Conoce, por lo tanto, la legitimidad de esa posición relevante   -no dominante-  que tiene la enorme variedad de manifestaciones del catolicismo en Chile.
        Pero no vacila en negarle a esas mayorías el derecho que supuestamente, entonces, sólo tendrían las minorías: "Creo que basta que la Iglesia Católica esté actuando como actúa en ciertos debates donde debería dejar que el Estado tenga su debate."
        Hay que entender bien a Letelier, en toda su extensión: no es cuestión sólo de que la Jerarquía católica quede silenciada; su mordaza se extiende obviamente a todos los católicos en el debate intelectual, a sus ONG, a las Universidades católicas, a sus organizaciones escolares, a sus radios y medios impresos, a los católicos en el  arte y en el deporte, porque para estas mentalidades estatizantes, silenciado el capitán, capturados los marineros.
        Afirma el senador, además, que el Estado debe tener su debate. ¿El Estado? ¿Ya no es la sociedad, en la que mayoritariamente hay católicos? ¿Se acabó la voz de la calle y de las organizaciones? ¿Si los cristianos salimos a marchar, como tendremos que salir y pronto, seremos impedidos de hacerlo por pertenecer a la "posición dominante"?
        Y termina su torta Letelier, con esta guinda. "Ahí creo que se extralimitan. Hay una cosa que es autocontrol, autorregulación, donde hay ciertos acuerdos del Estado con la Iglesia." ¿Acuerdos del Estado con la Iglesia? Este es un país con libertad de cultos, sin religión oficial, nada estatal obliga a los bautizados de modo distinto a quienes no lo son. La ley de cultos regula claramente la presencia de las religiones en Chile.
        "Nadie está cuestionando el derecho a opinar" , concluye el senador socialista. Él sí; y como lo sabe, afirma justamente lo contrario.

Gonzalo Rojas Sánchez